Jesús de la Garza platica sobre su libro “La máquina de Warhol”: “Esa es la magia de Warhol, es un espejo, cualquiera puede verse en él”.
Israel Morales/Monterrey
La poesía y el pop le llegaron a Jesús de la Garza a través de un icono, y además toda esa carga de inquietudes por evocar ese pasado colorido se transmite en “La máquina de Warhol”, editado por la UANL.
De esta llamativa obra, el autor nacido en Montemorelos comenta en entrevista:
¿De dónde nace “La máquina de Warhol”?
Se trata de una inquietud por el deseo de ser una máquina. Además, siempre me ha atraído, como espectador, la obra de Andy Warhol. El personaje en sí ejerce en mí un extraño magnetismo. Quizá se debe a que encuentro en él algunos rasgos de mi persona. Pero bueno, esa es la magia de Warhol, es un espejo, cualquiera puede verse en él.
¿Cómo trabajaste la estructura poética? Lo digo porque no me imagino de otra forma el hablar (escribir) sobre Warhol que no sea de las distintas formas gráficas que les diste a tus poemas…
Todo el libro es un ejercicio ecfrástico, los textos que lo componen están realizados a partir de una selección de obras del pintor. Carmen Avendaño ha señalado que se trata de una visita guiada a ciegas. Cada apartado corresponde, a mi parecer, a periodos específicos de la obra pictórica y audiovisual de Warhol.
¿Qué posibilidades te dio crear un lenguaje a partir de Warhol?
A mí me divierte mucho repetir, modificar, trastocar el lenguaje. El utilizar variaciones, permutar versos, y buscar las posibilidades textuales del pensamiento de Warhol es lo que más me interesó a lo largo del proceso de escritura.
¿Cómo encauzaste su vida y los personajes que estuvieron a su alrededor como Marilyn Monroe, William Carlos Williams, Truman Capote, etcétera?
En un primer momento, antes de escribir el libro, me documenté ampliamente respecto a la vida y obra de Warhol. Leí las biografías de Gopnik y de Bockris, consulté material audiovisual y revisé a detalle el trabajo de Pat Hackett. Hay un documental muy bueno sobre Warhol que ya no he vuelto a conseguir en internet, es de David Bailey.
Ya habiendo compartido tanto con Warhol, puedo decir que tenemos una relación íntima. Andy es mi novio.
Me llama la atención lo que mencionas del poeta fotocopiado, lo que ahora con la digitalización casi desaparece, sin embargo, tus poemas son muy de estos días, pese a estar ambientados de los 40 a los 80, ¿cómo te sentiste en este viaje al pasado del nacimiento de la cultura pop?
Va, pues, me han preguntado antes por eso de la fotocopia. Simplemente es lo que a mí me tocó vivir, y ya casi de salida. Además, fotocopiar puede ser un acto muy lindo, algo así como un gang bang literario ¿no?
Sea como sea, hay cosas que no cambian. Ahora, por ejemplo, copiamos y pegamos contenido todo el tiempo. Creo que la esencia del libro está en la falta intencionada de originalidad. Algo muy actual, incluso, en redes sociales, lo que se busca es repetir, emular y permutar.
Me da curiosidad, ¿cuál ha sido la respuesta de tus lectores?
A muchos les ha gustado la experiencia de lectura, les llama la atención que el libro requiriera una participación más activa de su parte para construir el sentido.
Otros me han dicho que no entendieron, que les parece muy críptico y extraño. Pero bueno, no todos los lectores están acostumbrados al esfuerzo.