La Santa Inquisición, presente en los Carvajal y en la fundación de Monterrey

En “Olvidarás el fuego”, Gabriela Riveros aborda la vida de Luis de Carvajal “El Mozo”, de aventuras y persecución de parte del Santo Oficio, así como su exploración de mundos, y desde luego una mirada sobre la fundación de Monterrey y todo lo que envuelve, en sus raíces y además la tradición sefardí, tan presente en estos años.

Israel Morales/Monterrey

Gabriela Riveros aborda en su novela “Olvidarás el fuego” (Lumen) la vida de Luis de Carvajal “El Mozo”, sobrino de Luis de Carvajal y de la Cueva, a quien se le atribuye la fundación de Monterrey anterior a la de Diego de Montemayor. Por ser judíos, “El Mozo” y su familia fueron perseguidos por la Inquisición, lo que en parte motivó la llegada a estas tierras de su tío, tema que se despliegan en esta historia, en la que además se desarrolla un entramado de adversidades por parte del “Mozo”, de exploración de mundos y desde luego una visión sobre Monterrey y todo lo que envuelve, en sus raíces y además la tradición sefardí, que sigue tan presente en estos años.

¿De dónde nace “Olvidarás el fuego”?

El inicio viene de mediados de los 90. Por aquel entonces comenzaban los festejos de los 400 años de la fundación de Monterrey y empezaban a circular aquellos otros datos que se quedan fuera de la historia oficial, y me sorprendió leer por ahí que detrás de aquella historia que nos enseñaban en la escuela de que Diego de Montemayor fundó la ciudad había una poco conocida que tenía que ver con una fundación anterior, un proyecto de Luis de Carvajal y de la Cueva, y que él y los miembros de su comunidad, que eran más de 100 personas, habían sido procesados por la Inquisición. Y el que más me sorprendió en esa historia fue el sobrino Luis de Carvajal “El Mozo”, que en sus últimos años cambió su nombre a Joseph Lumbroso. Me cautivó esta figura, que cómo es posible que un joven dé su vida a los 29 años en una muerte atroz en la hoguera, convencido de sus principios, este joven que además fue escritor, poeta místico, líder religioso, también fue comerciante, explorador, era un erudito. Me conmovió mucho y el antecedente es que aparece en unos tres o cuatro párrafos de “Ciudad de nadie”, de mi libro “Ciudad mía”, que salió en los años 90.

¿Qué te llamó la atención de Luis de Carvajal “El Mozo” para llevarlo a la novela?

En 2017, todo esto lo cuento en la novela, leí esta nota de que las memorias de Luis de Carvajal “El Mozo” habían aparecido en una casa de subastas, en las galerías Swan de Nueva York, que habían sido robadas de México 80 y tantos años atrás, y que a punto de ser subastadas descubrieron que eran estos originales. Y me llamó la atención que su vida nunca había sido llevada a la novela, sí al teatro, al cine o a la ópera, y dije voy a hacer la primera novela de Luis de Carvajal “El Mozo”, pues su vida está llena de aventuras, en sus memorias narra cómo Dios lo salvó a él y a su comunidad 25 veces de la muerte, es una historia fascinante y por otro lado me di cuenta que ahí estaban la historia de nuestros presente, los migrantes, la violencia, las traiciones políticas, la intolerancia, las luchas de poder, los intereses económicos. Y también es un homenaje a la palabra escrita, como era posible que durante más de cuatro siglos estas memorias que son del tamaño de la palma de mi mano hayan logrado sobrevivir, y me identifique con él por este deseo de vivir a través de las palabras, de escribir.

Que todo se enlaza en tu novela con Carvajal “El Mozo” y las tradiciones judías, ¿cómo se dio ese proceso?

Y en el 2018 empecé la investigación, recorrí bibliotecas, por aquí hay mucho material e historiografía, muy profesionales, pero solo en el plano académico, en el 2019, fui a España y Portugal, pude ver personalmente los libritos que se recuperaron. Pueblos como Medina del Campo donde están todos los apellidos de aquí, todo esto fue fascinante, este camino. Visité juderías que están en Portugal y que conservaron el secreto del judaísmo cinco siglos, cuando platicas con ellos te regalan una galleta que tienen la estrella de David, y abres el paquete y son las campechanas de Parras para nosotros. Encontrar todo eso que vas reconociendo, cosas que aparentemente son nuestras, pero que olvidamos a través de los siglos de dónde venían.

Además fui detectando estas pistas, incluso en el seno familiar o en las tradiciones de la región, que si comemos cabrito, tortillas de harina, machaca, los mazapanes, la manera de trabajar, la palabra güerco, que es palabra hebrea, hay como muchas cosas que esta fama que tenemos de codos en la región, incluso recuerdos más particulares en las familias cuando los abuelos o bisabuelos murieron se cubrían los espejos, la gente aquí suele llevar comida cuando alguien muere, todo eso que estoy mencionando son tradiciones judías.

¿Cuántos Carvajal murieron por la Inquisición?

El 8 de diciembre de 1596, que era el día de la Purísima Concepción, mueren en la hoguera su mamá Francisca y sus hermanas Leonor y Catalina, años después siguen matando a los demás. En un acto de fe de 1601 muere Mariana de Carvajal. En 1649 que fue el gran auto de fe matan a la más chica que es Anica de Carvajal, tenía casi 70 años, y como quiera la queman, lo que es muy terrible la historia.

Y a partir de tus investigaciones, ¿cómo se da la fundación de Monterrey con Luis de Carvajal, tío del “Mozo”?

Empecé a estudiar la historia de su tío, y para mi sorpresa durante cuatro siglos la historia se nos contó mal, porque hay un tema de arqueología de la historia, hace pocos años se descubrió en archivos de Portugal y España que lo que su tío escribió en la cárcel era verdad, pero lo más triste es que los historiadores tomaron por verdad lo que dijeron sus enemigos, a él se le consideró como un hombre esclavista, mentiroso, soñador, que presumía lo que no había hecho, eso es lo que dijeron los enemigos en su momento, y los historiadores tomaron eso como fuente primaria; sin embrago, hace poquito descubren toda la evidencia de que sí era verdad lo que él había dicho. Y claro, cuando salió esa información hubo mucha resistencia, primeros se dio a conocer en EU, porque aquí no querían que se diera a conocer esto, aquí ya estaban casados con la historia oficial, poco a poco sale esta información, como en la revista de Humanidades del Tec, y luego la UANL, finalmente traducen la obra de Samuel Tempkin, y empiezan a develar esta otra historia en donde resulta que ni sabíamos que Monterrey fue fundada por Gaspar Castaño de Sosa, que Luis de Carvajal hizo el proyecto, el que puso los nombres al Cerro  de la Silla, el río Santa Catarina se llama así porque su mamá se llamaba Catarina, incluso De León es el apellido materno de su familia, muchas cosas que los historiadores habían tergiversado, incluso decían que era la Villa de San Luis por el rey Luis de Francia, y no tiene ni vela en el entierro Luis de Francia aquí, Luis porque se llamaba Luis, por eso Gaspar funda la Villa de San Luis de los ojos de Santa Lucía. Entonces me di a la tarea de contar esa historia. Y yo no quería entrar en ese dilema de si Diego de Montemayor mató o no mató a su esposa Juana Porcayo, pero tuvieron que aparecer estos personajes en la novela porque la alianza que se hace de su hija Estefanía con Alberto del Canto tiene mucho que ver para que siguiera este proyecto del Nuevo Reino de León, así la novela fue creciendo, con muchas voces y también varias generaciones.