– Las cifras de asesinatos sitúan este proceso electoral como «uno de los más violentos de la región en los últimos años», señala el reporte.

Ciudad de México.- Sputnik

La misión de observadores de la Organización de los Estados Americanos (OEA) lamentó en un informe presentado el contexto de violencia en que se celebraron las elecciones federales y locales en México, que fueron las «más grandes y complejas» de la historia de este país.

La misión de observación encabezada por el ex presidente dominicano Leonel Fernández (1996-2000 y 2004-2012), «lamenta y condena cinco muertes en episodios aislados de violencia, ocurridos el día de la elección, y el contexto de violencia nacional en el que se celebró el proceso electoral», indica el documento.

Según datos proporcionados a la misión por fuentes oficiales, «hasta el 29 de junio, 103 actores políticos fueron asesinados en 25 estados (de 32 provincias en total) desde el inicio de la campaña electoral».

Entre estos asesinatos, los candidatos y precandidatos conforman el grupo más numeroso de víctimas (46 homicidios), seguido por funcionarios municipales (21), ex funcionarios municipales (22), funcionarios de partido (seis), ex legisladores (cuatro), funcionarios de órganos autónomos (dos), legisladores (uno) y ex aspirantes a cargos de elección popular en procesos anteriores (uno).

Estas cifras sitúan este proceso electoral como «uno de los más violentos de la región en los últimos años», dijo la misión electoral de la OEA.

Recuentos de organizaciones defensoras de derechos humanos indican que se cometieron más de 130 homicidios, y algunos partidos contabilizaron más de 140 asesinatos.

Asimismo, 2017 fue «el año más violento en dos décadas en México, generando un clima de inseguridad para la celebración de las elecciones del 2018», lamentaron los responsables del informe.

La misión felicitó al izquierdista Andrés Manuel López Obrador por su victoria en las elecciones «y saluda el espíritu democrático de los demás candidatos que aceptaron tempranamente la voluntad expresada por los mexicanos y mexicanas en las urnas».

Al mismo tiempo, la misión «felicita al pueblo mexicano por la exitosa celebración de las elecciones más grandes y complejas de su historia, al tiempo de saludar la participación de la ciudadanía, que acudió a las urnas en forma masiva para elegir más de 18.000 cargos», indica el informe.

La misión estuvo integrada por 65 expertos y observadores de 23 nacionalidades, que estuvieron desplegados en 25 estados de este país.

Los hallazgos

La misión constató que la campaña «se caracterizó por un discurso ofensivo por parte de contendientes políticos».

El candidato del Frente por México, Ricardo Anaya, denunció la publicación de un vídeo y comunicados de prensa por parte de la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía federal), que según el denunciante, «buscaban empañar su candidatura».

La misión informa que las autoridades electorales ordenaron el retiro de esos materiales de la PGR de los medios de comunicación oficiales.

Además, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación determinó que existió «infracción consistente en el uso parcial de recursos públicos para afectar la equidad de la contienda electoral» contra funcionarios de la PGR, que fue apelada y aún está pendiente de resolución.

La misión constató también «la divulgación de noticias falsas que buscaron desinformar y desacreditar el proceso electoral».

El día de la elección «transcurrió con tranquilidad en la mayoría de los estados», sin embargo, en algunos persistió la violencia electoral, prosigue el informe.

Si bien no pusieron en riesgo la elección, «durante la jornada se produjeron incidentes focalizados de violencia, incluidos el hurto y destrucción de boletas, balaceras y peleas en los alrededores de las casillas de votación, así como amenazas a representantes de partido y funcionarios de casilla».

De acuerdo con datos del Instituto Nacional Electoral, la votación tuvo que ser suspendida en solo 13 casillas (de más 167.000 en todo el país) «por robo, destrucción de materiales electorales, y el escrutinio y cómputo en dos por robo y destrucción de la documentación».

De acuerdo con diversos actores entrevistados por la misión, «el número de asesinatos y amenazas dirigidas a actores políticos ocurridos durante el período electoral sugiere la existencia de motivaciones políticas».

Asimismo, esas personas manifestaron que el origen de la violencia que afecta a este proceso electoral «está altamente relacionado a redes de delincuencia organizada, que operan a través de comandos armados y sicarios».

Representantes de partidos y candidatos entrevistados por la misión también manifestaron haber sido «víctimas de intimidaciones telefónicas y mensajes agresivos a través de las redes sociales», indica el texto.

Como consecuencias de amenazas, algunos aspirantes decidieron dejar la contienda.

De acuerdo con los testimonios, la falta de garantías de seguridad «fue especialmente crítica a nivel municipal, debido a las mayores limitaciones de las policías estatales y a la reducida confianza que estas despiertan en los actores políticos».

Para combatir esta problemática, la misión sugiere «un enfoque múltiple que reduzca los incentivos de la actividad delictiva y a su vez perfeccione las capacidades de las fuerzas de seguridad estatales».

La misión de la OEA recomendó, finalmente, reforzar los mecanismos de protección para los distintos actores políticos y representantes de la sociedad civil en período electoral.